De nuevo el ex city manager intenta hacerse notar ante los medios como el "mesías" de la ciudad, retirando enseres de la vía pública, cosa que no se critica, sin embargo, sí se critica su actitud prepotente y arrogante, porque no sólo agrede a mujeres, a personas con discapacidad y a los adultos mayores sino que piensa que tiene toda la autoridad para intimidar y humillar a los presuntos infractores en las redes sociales.
Por lo que su discurso y su acción tiene doble sentido ético, y nos gustaría invitar a Arne a que así como retira enseres, también nos retire por favor a los franeleros y a los ambulantes, que no sólo ocupan lugares en la vía pública y en la banqueta sino que impiden el libre tránsito de los peatones.
¿Acaso lo hará? Lo dudamos
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